Compañía - 04/12/2025
NSK Polonia celebra su 20.º aniversario
NSK Bearings Polska S.A. celebró el 20.º aniversario de su fundación en el mes de octubre. Fue en octubre del 2005, cuando NSK Iskra cambió de nombre como parte de un plan para ampliar la presencia de NSK en Europa Central y del Este.
El núcleo de lo que se convertiría en NSK Iskra era la planta de producción ubicada en Kielce, una ciudad del centro-sur de Polonia, a unos 180 km al sur de la capital, Varsovia. Fundada originalmente como fábrica de vidrio en 1897, ha crecido a lo largo de los años hasta convertirse en una planta de 286 000 m² que da empleo a más de 1200 personas y produce más de 15 millones de rodamientos de bolas al mes, además de otros 30 000 rodamientos adicionales de rodillos cilíndricos.
La fábrica de vidrio, propiedad de Dawid Bauman, se convirtió en una fundición de metal después de que Polonia obtuviera su independencia en 1918, produciendo artículos de hierro fundido y herramientas agrícolas. Durante la década de 1920, comenzó a fabricar componentes metálicos de precisión, incluidas piezas para uso civil y militar.
Después de la Segunda Guerra Mundial, la planta fue reconstruida y, finalmente, en 1958 se refundó como Iskra Precision Works. Durante las décadas siguientes, Iskra se consolidó por la producción de bujías, bujías incandescentes y rodamientos de alta calidad, cuyos productos se exportaron por todo el mundo.
En 1998, Iskra fue adquirida por la empresa japonesa NSK, uno de los principales fabricantes mundiales de rodamientos y componentes de precisión. Gracias a las inversiones continuas y a la modernización realizada desde entonces, la planta de Kielce sigue siendo hoy en día un centro de producción de primer orden.
Sin embargo, Kielce ya no es la sede central. En 2005, la dirección de NSK decidió trasladarla a Varsovia y cambiar el nombre de NSK Iskra por el de NSK Bearings Polska. Esta decisión formaba parte de un plan más amplio para expandir la presencia de NSK en Europa Central y Oriental, con especial énfasis no sólo en Polonia, sino también en los países vecinos, como Bielorrusia, los tres Países Bálticos, Ucrania, la República Checa, Eslovaquia y Hungría. También se realizaron importantes esfuerzos para establecer una presencia en Rusia, pero estos se abandonaron tras la invasión de Ucrania por parte de este país.
Se decidió que sería mucho más fácil para el personal de NSK viajar desde todos estos territorios a la capital polaca en vez de viajar hasta la sede original en Kielce. Aunque los trabajadores de la fábrica y el personal administrativo permanecieron en su lugar, el resto, incluidos el director del territorio, el delegado japonés, los coordinadores de distribución, los ingenieros, así como el personal de marketing, se trasladaron a la capital.
La nueva empresa se dio cuenta de que, para establecerse en tantos países, tendría que reorientar su cultura. El equipo directivo estableció varios puntos clave en los que debían centrarse, entre ellos desarrollar una comprensión clara de quiénes eran sus clientes, crear una imagen de marca sólida, implementar una estrategia de precios global, garantizar entregas fiables y asegurar que sus productos fueran de la máxima calidad del mercado.
Veinte años después, estas medidas han dado sus frutos, afirma Maciej Piatkowski, director de ventas de NSK. «Veinte años en Varsovia son un hito importante en la historia de NSK. Desde la creación de NSK Bearings Polska, hemos construido una base sólida para la expansión, fortaleciendo nuestras asociaciones en toda la región, apoyando a nuestro equipo de fabricación y acercando los productos y servicios de alta calidad de NSK a nuestros clientes.
Polonia es el centro estratégico de nuestras operaciones en Europa Central y Oriental, y nuestro talentoso equipo de Varsovia sigue impulsando la innovación, la eficiencia y la satisfacción del cliente mientras miramos hacia la próxima década de crecimiento».
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